"Todos los que han logrado grandes cosas han tenido un gran objetivo, han fijado su mirada en una meta que era alta, una que a veces parecía imposible" —Orison Swett Marden
Seguimos adelante con nuestro desafío de eliminar por completo la barriga. ¿Qué pasó esta semana? Te lo cuento en este vídeo.
¿Te gustó? Recibe gratis artículos con ideas y consejos sobre cómo superarte y ser tu mejor tu. Suscríbete AQUÍ
0 Comentarios
Carl Gustav Jung fue uno de los psicólogos más influyentes del Siglo XX y sus teorías aún hoy siguen siendo estudiadas con entusiasmo.
Fue discípulo de Sigmund Freud, aunque después se apartó de los postulados de este. Las siguientes son unas de sus frases más profundas:
¿Te gustó? Recibe gratis artículos con ideas y consejos sobre cómo superarte y ser tu mejor tu. Suscríbete AQUÍ
"La creatividad surge de la inocencia meditativa, de la pureza meditativa. Y ser verdaderamente creativo es solo posible a través de la meditación" —Osho
"Existe un océano de creatividad dentro de cada ser humano" —David Lynch
La creatividad es en la actualidad un rasgo con una gran demanda. Las personas creativas evitaran ser reemplazados por robots, inteligencia artificial y algoritmos.
En este vídeo explico cómo la meditación nos ayuda a utilizar todo el potencial infinito de creatividad que yace dentro de nosotros.
¿Te gustó? Recibe gratis artículos con ideas y consejos sobre cómo superarte y ser tu mejor tu. Suscríbete AQUÍ
"Dejemos que nuestros corazones se extiendan en compasión hacia los demás, porque todos están caminando por su propio camino difícil" —Dieter F. Uchtdorf
Los seres humanos somos un algoritmo creado por la naturaleza. Millones de años de evolución le han dado forma a lo que somos.
Tenemos un código genético (ADN) que decreta lo que somos. Esto no significa que, como robots, siempre respondemos de igual manera, sin ningún grado de libertad. Nuestro programa permite que podamos modificar nuestro comportamiento mediante el razonamiento, el entrenamiento, la experiencia y los cambios culturales. Lo que es importante entender es que mucho de lo que somos, no lo somos porque decidimos serlo; han sido millones de años de evolución los que nos hicieron así. Emociones como la envidia, los celos, la culpa, el enfado, están ahí porque en el pasado le brindaron ventajas adaptativas a nuestros ancestros. Nos gusten o no, hacen parte de lo que significa ser un ser humano. Ahora bien, sentir lo que sentimos no es nuestra culpa, pero los actos que realizamos si son nuestra responsabilidad. Es decir, el ser humano puede (algunas veces) controlar lo que hace, pero (casi nunca) puede controlar lo que siente. Dice el Dalai Lama que su religión es la compasión, y yo, cuanto más conozco la naturaleza humana, más me persuado de que está en lo cierto. Nuestra razón nos convence de que la dulzura, la lealtad, la bondad, la integridad son el ideal al cual deberíamos aspirar, pero nuestra más baja humanidad a menudo nos lleva por el camino de la envidia, la codicia, la culpa, la vergüenza y muchos otros males. Debemos entonces compadecernos a nosotros mismos porque vivimos en eterna contradicción; queremos ser ángeles, pero con frecuencia nos gobiernan nuestros demonios. Así lo expresaba con maestría el intelectual francés Blaise Pascal: Guerra intestina del hombre entre la razón y las pasiones. Si no tuviera más que la razón sin pasiones... Si no tuviera más que las pasiones sin razón... Pero, puesto que tiene lo uno y lo otro, no puede estar sin guerra, porque no puede conseguir la paz con lo uno sin estar en guerra con lo otro: así pues, está siempre dividido y siempre es contrario a sí mismo.
Queremos ser mejores, pero nos quedamos cortos una y otra vez. Entonces nos castigamos, dedicamos duras palabras hacia nosotros mismos: «eres de lo peor», «nunca vas a aprender», «otra vez la volviste a cagar, ¡perdedor!».
Pero ese, el camino de la autoflagelación, no es el camino que nos llevará hacia nuestras mejores luces. Como muy bien lo sabe el prudente Dalai Lama, el camino es el de la compasión. Si queremos llegar a ser mejores, debemos primero ser amables con nosotros mismos. Con frecuencia pensamos que la auto compasión puede llevarnos a asumir menos responsabilidad por nuestros actos, pero las investigaciones señalan en la dirección contraria. Un estudio realizado por las investigadoras Juliana Breines and Serena Chen encontró que «la autocompasión motiva a las personas a mejorar sus debilidades personales, las transgresiones morales y el rendimiento en las pruebas académicas». Ahora ya sabemos que ser amables con nosotros mismos, que entender que nuestra condición humana es imperfecta, nos ayuda a mejorar. Pero esto no es suficiente. No nos podemos quedar ahí. La auto aceptación nos debe conducir a la aceptación de los demás. Si somos compasivos con nosotros mismos porque sabemos de nuestras flaquezas, también debemos serlo con nuestros semejantes, pues ellos están también llevando a cabo la misma batalla que nosotros. Así pues, compasión para todo el mundo, para contigo mismo, para tu pareja, hacia tus hijos, hacia el vecino, hacia los hijos del vecino… solo así, por medio de la amabilidad radical, podremos llegar hacer «los mejores ángeles de nuestra naturaleza».
¿Te gustó? Recibe gratis artículos con ideas y consejos sobre cómo superarte y ser tu mejor tu. Suscríbete AQUÍ
"La verdadera medida del éxito es cuántas veces puede uno recuperarse del fracaso" —Stephen Richards
La semana pasada tropecé; en lugar de perder peso, lo gané. La vida social se interpuso en mi camino y no fui capaz de resistirme a sus encantos.
¿Qué ocurrió esta semana? Descúbrelo en el cuarto reporte del Desafío ¡Adiós Barriga!
¿Te gustó? Recibe gratis artículos con ideas y consejos sobre cómo superarte y ser tu mejor tu. Suscríbete AQUÍ
"El fracaso es tan importante. Todo el tiempo hablamos del éxito. Es la capacidad de soportar el fracaso o hacer uso del fracaso lo que a menudo conduce a un mayor éxito. He conocido personas que no quieren intentarlo por miedo a fracasar" —J.K. Rowling
El ser humano tiene la tendencia a querer mostrar siempre su lado más luminoso.
Pero resulta que hablar también de nuestros errores, derrotas y vacilaciones puede llagar a ser de gran utilidad para aquellos que nos rodean.
¿Te gustó? Puedes suscribirte AQUÍ y recibir gratis artículos con ideas y consejos sobre cómo superarte y ser tu mejor tu.
John Perry Barlow (1947-2018) fue poeta, ensayista y activista político. Luchó por hacer de internet un lugar de libertad en el cual todas las voces pudieran ser escuchadas.
Con motivo de su reciente fallecimiento, encontré una lista que realizó cuando tenía treinta años, y que enumera lo que para él eran los principios del comportamiento adulto. Palabra por palabra, son pura sabiduría: 1. Sé paciente. No importa qué.
¿Te gustó? Puedes suscribirte AQUÍ y recibir gratis artículos con ideas y consejos sobre cómo superarte y ser tu mejor tu.
"Esos donuts no son comida. SON VENENO"
Discipline Equals Freedom, el libro de Jocko Willink, es un texto que pienso se debe ir bebiendo en sorbos cortos.
Quizá la mejor hora para hacerlo sea en la mañana, justo antes de reanudar la acometida hacia tus objetivos y la vida que deseas vivir: te pondrá con la actitud mental correcta. Esta mañana mientras lo leía me encontré un pasaje que inmediatamente quise compartir contigo. Espero te ayude a resistir la tentación. A decir NO al enemigo. MENTIRAS AZUCARADAS
¿Te gustó? Puedes suscribirte AQUÍ y recibir gratis artículos con ideas y consejos sobre cómo superarte y ser tu mejor tu.
"Un hombre viene a medir su grandeza por los remordimientos, envidias y odios de sus competidores" —Ralph Waldo Emerson
Versión en vídeo AQUÍ
La envidia no siempre fue mala. Y aún hoy la podemos usar a nuestro favor.
No, no te estoy diciendo que ahora puedes empezar a ejecutar esos siniestros planes que has estado imaginando contra tu compañera de oficina, que es la consentida del jefe. El asunto es algo más sutil. Durante una gran parte de nuestra historia la envidia cumplió con una importante labor evolutiva. Imaginemos a dos de nuestros más antiguos antepasados, cuyas tierras estaban una al lado de la otra. Ahora imaginemos que uno de ellos produce en su terreno el doble que el otro. Para nuestro ancestro improductivo es conveniente que surja cierta contrariedad con respecto al vecino más fecundo, pues es evidente que aquel sabe algo que el no. La envidia le hace interesarse por lo que hace mejor su vecino, y quiere entonces, descubrir cual es su secreto, de esta manera podrá rentabilizar su tierra de la misma manera. La envidia impulsa al rezagado a emular a su vecino más próspero. Investigaciones realizadas han encontrado que esa envidia, bien encausada, puede también ser hoy un gran estímulo para nuestro crecimiento. Así lo expresa la destacada psicóloga Susan David en su buen libro Agilidad Emocional: En realidad, la envidia puede ser un motivador muy fuerte que nos impulsa hacia la superación personal, incluso más fuerte que la admiración. Un estudio mostró que los estudiantes que expresaban una envidia benigna hacia un estudiante más exitoso mostraban más motivación que aquellos que expresaban admiración. Los participantes envidiosos intensificaron su esfuerzo en las tareas escolares y se desempeñaron mejor en varias pruebas verbales.
El caso de los estudiantes envidiosos es un ejemplo de buen uso de este incómodo sentimiento.
Sin embargo, la envidia saludable no es lo más frecuente en nuestra mediatizada sociedad. Al contrario, el estarnos comparando y anhelando las bendiciones que otros disfrutan está causando serios problemas sicológicos en la población. Nuestros ancestros no tenían acceso a las redes sociales ni a los medios masivos de comunicación, ellos se comparaban con quien era su vecino y que vivía bajo condiciones muy similares a la suya. Así pues, la lucha por emularse era justa y podría resultar beneficiosa. Nuestra situación es diferente; hoy, a través de las redes sociales, nos comparamos con una gran cantidad de personas que viven bajo condiciones muy dispares. Algunos tienen acceso a oportunidades que otros no. Cuando existen diferencias tan grandes, no resulta apropiado ni saludable un gran interés por lo que hacen o tienen los demás. ¿Cómo podemos entonces vacunarnos contra la envidia corrosiva? Clarificando que es lo importante en nuestra vida. Cuando tenemos certeza acerca de lo que más valoramos, que es lo que en realidad queremos conseguir, los asuntos ajenos pierden relevancia. Continuemos con Susan David: Tener una comprensión clara de sus propios valores es fundamental para el cambio y la realización. No es solo que los valores sean buenas cosas para tener. Las investigaciones muestran que los valores realmente nos ayudan a acceder a mayores niveles de fuerza de voluntad y determinación, y nos protegen del contagio social negativo.
Para concluir. Si te vas a comparar con otros, asegúrate que sean personas que están en la misma senda tuya, que luchan por objetivos similares y con recursos similares. De esta manera usarás esa envidia benigna como motor de crecimiento.
Aunque creo que resulta incluso más apropiado saltarse las comparaciones con otras personas y compararte sólo con la persona que eras ayer. Si eres hoy mejor que entonces, descansa tranquilo, vas por buen camino.
¿Te gustó? Puedes suscribirte AQUÍ y recibir gratis artículos con ideas y consejos sobre cómo superarte y ser tu mejor tu.
"La buena vida es una inspirada por el amor y guiada por el conocimiento" —Bertrand Russell
Muchos de los problemas de las personas terminarían si dejaran atrás la arrogancia de creer conocen todas las respuestas. No es así.
Ser padres, compañeros, profesionales competentes, ¡como vivir!, son asuntos complejos en los que muy a menudo nuestras intuiciones nos hacen perder el rumbo. Recuerdo muy bien como en la mitad de mis treinta esa arrogancia dominaba por completo mi manera de pensar. Consideraba débiles y aniñados a quienes buscaban consejo y orientación sobre cómo vivir su vida. ¡Ay!, ¡que perdido andaba! Por fortuna, la vida se encargó de mostrarme lo equivocado que estaba. No tenía ni idea de que iba este asunto de vivir. Hoy mi vida avanza por una senda más conveniente gracias a la búsqueda de conocimiento. Dejé a un lado mi insolencia, mi chulería, y presté atención a lo que las grandes mentes de la humanidad han descubierto y querido contarnos. Cada aspecto de nuestra vida es susceptible de ser mejorado gracias al conocimiento. Por ello, cuanto más aprendemos, mayores son nuestras posibilidades de cumplir nuestras metas y vivir una gran vida. Asimismo piensa el condecorado ex marine de los Estados Unidos Jocko Willink. Esto escribió en su libro Discipline Equals Freedom: El conocimiento es una herramienta poderosa.
Hay un conocimiento que destaca por encima de todo, es el más necesario: el conocimiento de uno mismo.
No es posible vivir bien, si no sabemos quienes somos y que es lo que en realidad queremos. Continua Jocko: Y lo más importante: cuestiónate a ti mismo.
¿Te gustó? Puedes suscribirte AQUÍ y recibir gratis artículos con ideas y consejos sobre cómo superarte y ser tu mejor tu.
|
Tu privacidad está a salvo, tu correo no será compartido con nadie
pablo a. arangoLector. Escritor. Coach. Emprendedor. Puedes apoyar a Las Notas del Aprendiz entrando a Amazon a través de este enlace
Archivos
Agosto 2022
|