"El éxito no es el final, el fracaso no es fatal: es el coraje para continuar lo que cuenta"
Winston Churchill
Guillian Zoe Segal es la responsable del fenomenal libro Getting There (Llegar Ahí). Segal pidió a un grupo de personas de éxito abrumador, que escribieran un pequeño relato sobre como fue su camino hasta el distinguido lugar que ocupan dentro de sus profesiones.
En la lista encontramos personajes como el multimillonario inversor Warren Buffett, la también multimillonaria emprendedora, Sara Blakely (sobre quién se trata este artículo); Matthew Weiner, el creador de la exitosa serie Mad Men y muchos otros más. Cuando pensamos en personas con logros de esa magnitud, tendemos a creer que su camino hasta ahí ha sido de constante ascenso, que a través de los años fueron subiendo por la escalera del éxito hasta llegar a la cima. Aunque en algunos casos fue así, en muchísimos otros (quizás la mayoría) no. Es común encontrar que los protagonistas de estas historias, durante muchos momentos de su vida, no tenían ni idea que hacer ni hacia dónde dirigirse. Su trayectoria no fue recta. Todo lo contrario, hubo desviaciones, retrocesos, abandonos y, como no, fracasos. Una de las historias más inspiradoras es la de Sara Blakely, fundadora de Spanx. Sara es uno de esos casos donde el éxito ocurrió de una manera muy diferente de lo que ella esperaba: Desde que puedo recordar, yo quería ser un abogada litigante. Todas mis decisiones fueron tomadas con ese objetivo en mente. Era la profesión de mi padre y, siendo niña, solía suplicarle que me permitiera verlo en el tribunal. Durante los argumentos finales, él me permitía faltar a la escuela y me sentaba allí todo el día, tomando notas sobre los diferentes miembros del jurado. Amé cada minuto que pasé ahí.
Después del trauma de ver sus sueños de niña derrumbarse, Sara entró en un periodo de incertidumbre que la llevó a pasar por diferentes empleos. Audicionó en Disney para trabajar en uno de sus parques, haciendo el papel de Goofy, pero, como era muy pequeña, terminó interpretando a una ardilla. Luego tomó un empleo como vendedora de faxes puerta a puerta, empleo en el cual se destacó y donde se volvió inmune a la palabra ‘no’. También hizo stand-up comedy en las noches.
Tras siete años como vendedora de Faxes, Sara soñaba con poder vender algo producido por ella. Un día, mientras se vestía para salir, llegó la inspiración. Queriendo lucir bien en unos pantalones blancos, cortó las piernas de unas pantimedias y se las puso en lugar de la ropa interior. Cuando vio el efecto adelgazante de su invento, y lo bien que lucía su trasero, supo que esa era su oportunidad. Ese era el negocio que mi mente había estado creando durante todo ese tiempo.
Cuando finalmente Sara contó en que estaba trabajando, los comentarios de sus allegados fueron recelosos, dudaban de que su idea pudiera llegar a tener éxito. Durante los siguientes meses, Blakely se enfrentó a todos los contratiempos que normalmente enfrenta quien decide emprender, fue aquí cuando se benefició de la impermeabilidad que había adquirido contra el ‘no’.
La historia de Sara Blakely es completamente inspiradora. Después del trauma que significó para ella no entrar en la escuela de leyes, estuvo deambulando por varios empleos aparentemente sin rumbo fijo, pero luego, el tiempo demostró que todas esas habilidades que adquirió mientras buscaba su verdadero camino, resultarían invaluables para el éxito de su emprendimiento: La combinación de ser inmune a la palabra "no", haber coqueteado con la comedia, visualizar mi producto, y no tener miedo al fracaso, fueron los factores críticos para el éxito de Spanx. Yo estaba dispuesto a sudar por esta oportunidad.
Su consejo final:
He pasado por un montón de traumas en mi vida. La mayor parte de ellos se derivan de las inesperadas trágicas muertes de gente que quiero y del muy doloroso divorcio de mis padres cuando tenía dieciséis años. Justo antes de que mi padre se fuera de casa, me entregó una serie de diez cintas del Dr. Wayne Dyer, ‘Cómo ser una persona sin límites’ y dijo: "Me habría gustado que alguien me hubiera dado esto a mí cuando tenía tu edad."
2 Comentarios
13/7/2015 11:37:13 am
Estoy empezando a trabajar en proyectos sin objetivos. Y parece que la cosa funciona.
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Pablo
13/7/2015 01:47:13 pm
Espero te funcione, #Jerby
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pablo a. arangoLector. Escritor. Coach. Emprendedor. Puedes apoyar a Las Notas del Aprendiz entrando a Amazon a través de este enlace
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